Duelo perpetuo
Un anhelo sin futuro, una hipótesis sin premisa, un deseo que nunca fraguará porque nunca ha sido real. La angustia sin sentido desborda mi entereza, me deprime y me deshila, me descose y desvanece cualquier recuerdo de mi integridad. Ponzoñosa ansiedad que me intoxica.
Tan sólo una mirada, un gesto, un liviano recuerdo de complicidad, algo que evoque lo que fuimos y creamos, lo que amamos y yo por desgracia aún persigo.
Duele tanto como perjudica y no sin saña juegas a sentirte fuerte. Dulce inocencia en la que te bañas para inundar de indulgencia tus desdenes con soberbia… o al menos, eso intentas.
Pierdo mi línea, me desdibujo sin ser yo mismo y dudo que vuelva a serlo, porque vendí mi figura al mercader equivocado. Me la jugué a un número inexistente y ahora plago de tristeza mis despertares en tu ausencia.
Te sigo sintiendo, corazón.
Escuchando: La chispa adecuada
Autor: Bunbury
